Alertas a lo que podría salir de los arbustos se prepararon para luchar no obstante lo que salió les hizo bajar la guardia, provocando que le dedicaran miradas de incredulidad: Era un Digimon que jamás han visto pues es pequeño, de colores vivos, la parte superior de su anatomía es la de un ratón de peluche y la parte inferior parece estar metida dentro de un zapato en harapos que a su vez lo usa como medio de transporte. Luego dando pequeños saltos se escondió detrás de Dvalin y Dainsleif mientras se cubría la cara con la finalidad de protegerse. Tatsuya por su parte buscó información sobre ese Digimon en su celular pero los datos eran insuficientes a pesar de que tiene un enorme glosario de las especies registradas con la finalidad de que se reconozcan a las especies de antemano. Sin duda alguna es una nueva especie sin embargo a juzgar por su apariencia fácilmente se le podría clasificar como un tipo marioneta. El pequeño seguía escondido detrás de los otros Childs y estos se preguntaban extrañados ¿Qué pasa?, pero fue Dvalin el que decidió romper el hielo al hablarle de forma directa.
-Disculpa, ¿Quién eres y porque te escondes detrás de nosotros? – Preguntó finalmente, en respuesta el nuevo ser digital reaccionó alzando la mirada al Pteromon que tiene en frente suyo.
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-Me disculpo, mi nombre es Shoemon – Habló con un tono suave y femenino, confirmando que es una hembra – Me escondo porque me persiguen unos Digimons acosadores que me quieren hacer daño y estoy asustada –.
Dainsleif observó los alrededores cerciorándose de que no haya nadie cerca pero de pronto los arbustos se sacudieron de nuevo alertando al grupo y ambos Childs se pusieron delante de Shoemon protegiéndola y listos para cualquier cosa de nuevo. No esperaron mucho ya que aparecieron dos Digimons un tanto peculiares; el primero tiene la apariencia de un castor de peluche debido a la forma de la cola que llevaba en su retaguardia, sus extremidades inferiores eran un par de ruedas y en su espalda portaba un cañón, el segundo Digimon se asemejaba más a un Gabumon aunque de diferentes colores, predominando el lila en la mayor parte de su cuerpo, en la franja amarilla de su abdomen se encuentra dibujado un cráneo de color verde dando a entender que es peligroso, junto a su abrigo que le cubre la espalda y el rostro que es de color blanco con rayas moradas junto a su característico cuerno del mismo color rosado. Tatsuya al revisar su información vio que son un Junkmon y un Psychemon respectivamente.
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-Son ellos – Dijo temblorosa Shoemon.
-¿Así que ustedes son los acosadores eh? – Preguntó Dainsleif cruzado de bracitos viendo con desaprobación al par que la perseguían.
-Eso no te incumbe enano, ahora apártate – Le dijo Psychemon a Hackmon quien al ser referido con ese diminutivo les dedicó una mueca de desagrado, no obstante, se abstuvo de atacarles por el momento. Dainsleif como Digimon sereno que es no podía dejarse llevar cada vez que le ofenden de esa manera y menos en presencia de una dama (¿).
-Lo siento, pero no lo haremos – Respondió Dvalin al dúo de acosadores – Les advierto que detesto a los bravucones y ya se han ganado una buena paliza – Les amenazó ya que recordó cuando sufrió lo mismo mucho tiempo atras.
-¿Tu?, darnos una paliza je – Se burló Junkmon y luego le dedicó una mirada de enojo tanto a Dvalin como a Shoemon – La nueva generación es muy arrogante y no deberían existir. Espero que Oberon los borre algún día de la faz del Mundo Digital - Concluyó con palabras cargadas de desprecio.
No es la primera vez que el trío dinámico escucha ese término, “Nueva Generación” refiriéndose a las nuevas especies de Digimons que recientemente fueron descubiertas y al parecer los antiguos residentes no ven con buenos ojos que estén poblando el DW lentamente, cuando deberían convivir en armonía. Ellos desconocen los motivos y no les sorprende esta clase de racismo pues lo mismo pasa cuando se refieren a las especies que portan el X-Antibody, ya sea que lo adquieran o lo tengan de forma natural. Algunos Digimons continúan atacándoles sin motivos y más de una vez se ha demostrado que son miedos y martirios infundados porque hay quienes han demostrado coexistir. Dvalin entra en ese rubro de ser nueva especie ya que no ha visto a nadie igual a él desde su nacimiento y convivencia en su antigua parvada. En términos generales las especies de aves Digitales varían y abundan en el 90 % de los ecosistemas del DW pero un Pteromon es inusual, aunque eso no le ha importado a Dvalin ni tampoco se siente especial, él solo vive la vida como cualquier Digimon acompañado de amigos y compañeros.
-Si tanto quieres desaparecerme te reto a que lo intentes – Desafió Dvalin poniéndose en guardia.
-Je, este chico quiere morir, me encargaré de él – Junkmon respondió dando un paso al frente. – Retrocede Psychemon– Al decir esto, la copia rosada de Gabumon obedeció.
Hackmon les dio espacio alejándose unos metros atrás, llevándose a Shoemon consigo, Tatsuya prefirió no intervenir sabiendo que su Digimon puede encargarse sin problemas del asunto y está seguro de que al ver que no se las va a poner fácil optaran por retroceder. En cuanto a Dvalin y su oponente se miraron fijamente unos instantes antes de que el puppet usara su cola con la finalidad de golpear el saco adherido a su espalda provocando que su cañón dispare desperdicios como trozos de metal, tuercas y tornillos oxidados, en respuesta el ave dragón se elevó en el aire evitando los proyectiles sin embargo el Digimon marioneta no se detuvo y continuó atacando de la misma forma tratando de impactarle no obstante, su rival esquivaba y al mismo tiempo se lucía en frente de Shoemon mientras que Dainsleif se llevaba la palma a su rostro y Tatsuya lanzaba un suspiro pues saben que se está confiando y le pueden patear el trasero. A continuación, Dvalin lanzó su técnica Wind Slicer pero su rival se movió más rápido gracias a sus ruedas, sin percatarse de que Psychemon le disparó un rayo colorido desde la punta de su cuerno a quemarropa causando que el ave dragón fuera derribado cayendo al suelo. Al ver eso Dainsleif se abalanzó velozmente con la intención de auxiliar a su amigo, pero Junkmon se interpuso frenando su carrera en seco.
-Ustedes… - El pequeño dragón blanco expresó su disgusto enseñándole las garras, al mismo tiempo que Dvalin se levantaba del suelo – Hey, eso te pasa por confiarte -.
-Si, supongo que me lo merezco, pero esta vez voy enserio -.
-Vengan por nosotros entonces – Se burló Psychemon viendo como el Pteromon quedó en ridículo, aunque a Shoemon lejos de avergonzarse solo se preocupó más ante la situación que corría riesgo de complicarse.
-No pierdan el tiempo y denles una paliza –Habló finalmente el Tamer japonés fastidiado de que esos dos anden jugando y luego miró a Shoemon – Quédate cerca, ¿ok? – Le pidió y ella asintió obedeciendo.
A continuación, ambos Childs se abalanzaron sobre los bravucones, en respuesta Junkmon atacó con su cañon de desperdicios, pero Pteromon voló eludiéndolos y luego cayó en picada usando sus garras para dañarle, esta vez la marioneta no pudo defenderse de cualquier forma quedando volteado y trató de incorporarse, pero las ruedas le dificultaban maniobrar su anatomía. Psychemon lanzó de nuevo su electricidad colorida de su cuerno, pero Dainsleif esquivó y usó sus garras afiladas dándole una estocada que le hizo retroceder y rechinando los dientes miró al pequeño dragón blanco, quien le devolvió el gesto con una mirada serena y casi imperturbable dando a entender que no van a tener escapatoria. Sin opciones el Gabumon rosado atacó velozmente inclinando la cabeza intentando cornear a Hackmon quien le detuvo el cuerno con ambas garras y abrió sus fauces lanzando su baby flame a quemarropa causándole leves quemaduras que lo hicieron retroceder nuevamente.
-¡Toma esto! – Exclamó usando su técnica de viento en Junkmon consiguiendo derribarlo de una vez por todas.
-¿Eso es todo?, me han decepcionado – Dainsleif suspiró causando que los otros dos Childs vencidos apretaran los dientes del enojo.
-¡Tsk!, ¡Qué esperas Bakomon mata al humano y llévate a Shoemon! – Ordenó furioso Psychemon, ante la amenaza, ambos Childs se voltearon en dirección a Tatsuya que estaba con Shoemon, la mencionada se puso instintivamente delante del Ex Yakuza para protegerlo pues sentía que es su responsabilidad si hay alguna repercusión, pero no ocurrió lo que los malvados Childs esperaban…
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Pasaron unos segundos sin que nada saliera a emboscarlos hasta que de los arbustos emergió el mencionado Bakomon, un Digimon cuyo cuerpo está formado de cajas de cartón salvo la de una rodilla que parecía ser una pequeña de regalo, junto a una cinta que tenía por mano, pero lejos de lanzar algún ataque, el Digimon mutante cayó noqueado al piso, exaltando a Psychemon y Junkmon. Detrás de Bakomon salió un Digimon que lucía como un pequeño dragón de color azul y un pelaje blanco adornando alrededor de su cuello, sus extremidades superiores/inferiores, cola y protuberancias craneales parecían estar hechas de hielo. Extrañado Tatsuya revisó la data revelando el nombre del Digimon: Un Blucomon lo cual le pareció extraño pues no es común que un tipo hielo ronde zonas templadas y húmedas.
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-¿Todos se encuentran bien? – Preguntó Blucomon acercándose a Shoemon.
-Si… Estamos bien – Respondió aliviada.
-Me alegra escuchar eso – Detrás del Digimon de hielo salió un humano, al parecer era su Tamer – Bien hecho Blucomon – Lo elogió y echó al resto de personas reunidas – Estamos cerca de Mondstadt y no deberían armar alboroto a menos que quieran ser arrestados – Aclaró mirando al resto.
Tatsuya observó con precaución al joven; alto, de complexión delgada y piel sepia, que se destaca por darle un aspecto extraño. Su ojo visible es agudo y tiene el pelo azul marino, acompañado de mechas de un azul más claro, que mantiene recogido en una larga coleta que le llega hasta la cintura. Su flequillo está cortado en una franja larga que cae sobre el lado derecho de su rostro y casi cubre su ojo derecho. Lo que más llamó su atención es el parche en el ojo dándole un poco de mala espina. En cuanto a su ropa es ceñida y consiste en una camisa blanca abierta, una chaqueta azul delgada y pantalones oscuros ajustados. Lleva un corsé negro alrededor de su cintura y, a pesar de que su camisa tiene cuello y está sujeta en el cuello con una hebilla y una cadena de oro, su pecho está completamente enmarcado. Lleva una capa que se asemeja a una sola ala sobre su hombro izquierdo, forrada por una piel de piel sobre su hombro derecho. También usa guantes sin dedos marcados con la misma forma de diamante que sus ojos, muñequeras con púas y botas altas. Su Digivice (Un D-Arc con colores a juego) está unido a su cadera derecha en su cinturón con una cadena, y un arete azul cuelga de su oreja izquierda.
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-¡Lo sabía!, ¡Son Kaeya y Adler!, ¡corran! – Exclamó Psychemon muerto de miedo y los tres huyeron como almas que persigue el demonio.
-Veo que tienes tu reputación –Le indicó Tatsuya con aires de desconfianza – Pero gracias… supongo – Le respondió secamente.
-Vamos no pasa nada, considérenlo una muestra de agradecimiento de mi parte porque ustedes protegieron a Shoemon quien es víctima de bullying constantemente por ser de nueva especie – Le dijo, y luego le observó detenidamente causando más incomodidad en el de pelo negro – Nunca los he visto por aquí, me imagino que se dirigen al poblado de Mondstadt, yo puedo serles de guía - Se ofreció.
-¿Ustedes que opinan chicos? – Tatsu les preguntó a sus Digimons – Aunque no íbamos allá, podríamos pedir información – Agregó.
-Mientras no salgan más alimañas me parece perfecto – Le respondió Dainsleif
-Lo mismo digo – Dijo Dvalin y luego miró a Shoemon – No nos dijiste que eras de Mondstadt-.
-Lo siento, me encontraba asustada. Ellos me localizaron mientras estaba en el bosque, me siguieron y fue cuando me topé con ustedes – Aclaró ella un poco acongojada.
-Lo importante es asegurar que esos sujetos no se atrevan a molestarte de nuevo, saben que dentro de los límites de Mondstadt no pueden armar un alboroto así que esperaron a que salieras – Indicó el Blucomon un tanto indignado pues no puede entender por qué molestan a la Digimon marioneta si ella no se mete con nadie y que sea de “Nueva generación” no les da derecho a abusar.
-Bueno ya todo se solucionó así que regresemos – Propuso el moreno – Oh que modales los míos, me presentaré formalmente, mi nombre es Kaeya, Kaeya Alberich, miembro de la Guild Favonius Knights – Concluyó su presentación extendiéndole la mano a Tatsuya para que le corresponda el saludo.
-Mi nombre es Adler, soy amigo y compañero de Kaeya, mucho gusto – El Blucomon saludó alzando el brazo.
-Tatsuya Kamisato – Le correspondió el saludo de mano.
-Soy Dainsleif, un placer – Se presentó Hackmon.
-Yo soy Dvalin, es un gusto conocerles – Imitó Pteromon.
-Ahora que ya todos nos presentamos, regresemos – Indicó Kaeya emprendiendo el camino de vuelta al poblado.
